Nacional de Montevideo (URU) Vs. Estudiantes LP (ARG), Semifinal, VUELTA

Estudiantes LP primer finalista

Estadio Centenario

(1) 1 - 2 (3)

Min. 52 Mauro Boselli (Estudiantes LP)

Min. 76 Alexander Medina (Nacional de Montevideo)

Min. 90+1 Mauro Boselli (Estudiantes LP)

Final

Estudiantes de La Plata realizó un partido inteligente en el estadio Centenario de Montevideo, donde venció a Nacional por 2-1 y consiguió el pase a la final de la Copa Santander Libertadores.

El conjunto de Alejandro Sabella realizó un excelente planteo defensivo y aprovechó las pocas posibilidades que se le presentaron para liquidar un encuentro que a priori pintaba más complicado, pero el conjunto platense, pese a no contar con su figura, Juan Sebastián Verón, lo hizo sencillo.

Mauro Boselli, a los 7 y a los 46 de la parte complementaria, le dio la victoria al "pincharrata". Alexander Medina a la media hora de esa etapa, había empatado transitoriamente cuando ya era demasiado tarde ya que tras el primer tanto albirrojo, el equipo tricolor necesitaba marcar tres goles para revertir la historia.

Ahora Estudiantes deberá esperar lo que ocurra en Porto Alegre, donde Gremio, tras perder el partido de ida 3-1, tratará de revertir la historia frente a Cruzeiro de Belo Horizonte. La primera final se desarrollará en La Plata el miércoles próximo.

De esta manera, el conjunto platense se metió en la final copera por primera vez desde 1971. Estudiantes ganó la tradicional Copa Libertadores en 1968, 1969 y 1970 y dejó afuera al equipo uruguayo, campeón en 1971, 1980 y 1988.

El primer tiempo fue bastante desprolijo y mal jugado, con una idea clara de Estudiantes que era poner a la última línea lo más lejos de Mariano Andújar, y otra de Nacional no tan clara.

El elenco uruguayo tuvo más la pelota pero chocó una y otra vez y no supo como resolver de tres cuartos de cancha en adelante, en parte por mérito del elenco platense que defendió bien y neutralizó a volantes y delanteros locales.

Estudiantes llevó el partido al terreno que más le convenía. Jugó lejos de su arco e intentó lastimar a través del contragolpe con pelotazos largos para Boselli y Gastón Fernández.

Y en es etapa cumplió el objetivo de mantener el cero en su valla. Andújar apenas intervino en una ocasión y no tuvo mayores inconvenientes para contener un tiro libre de Adrián Romero a los 6 minutos de juego.

Con Rodrigo Braña copando el medio y una gran solidez en defensa, Estudiantes no pasó zozobras en esos 45 minutos iniciales. Y casi se va en ventaja cuando en el cierre Juan Manuel Díaz ejecutó un "buscapié" desde la iqzuierda y Boselli remató apenas desviado desde adentro del área chica.

Con el ingreso de Nicolás Lodeiro, Nacional pasó a dominar la pelota en el segundo tiempo. y cerca estuvo de abrir la cuenta cuando un disparo del ingresado se fue besando el poste derecho de Andújar. Pero un grosero error de Sebastián Coates, quien perdió la pelota ante Fernández, le permitió a Estudiantes abrir la cuenta.

La "Gata" tomó la pelota y habilitó a Boselli, quien con un toque suave definió ante la salida de Rodrigo Muñoz a los 7 minutos del segundo tiempo.

Y aunque Nacional luego salió de su letargo, los nervios se lo fueron consumiendo. Necesitaba tres goles, pero apenas marcó uno, a través de Alexander Medina, gestado más con el corazón que con el cerebro.

Faltaban 15 minutos pero Estudiantes mantuvo la calma y en el cierre logró desnivelar las acciones en una contra culminada por Boselli, la figura del partido. Y terminó festejando una gran victoria que lo vuelve a depositar en la final del principal certamen continental tras 38 largos años. Y ahora irá por su cuarta Libertadores.

El emblemático capitán de Estudiantes, la Brujita Verón, finalmente no viajó a la capital uruguaya para presenciar el encuentro entre sus compañeros y Nacional y sufrió al verlo por televisión.

Verón, quien se perdió este choque por una distensión en el gemelo de la pierna izquierda, se especulaba con que asisitiera al Centenario en apoyo a su equipo, aunque finalmente prefirió no estar y seguirlo por televisión.

Así, sin su gran referente y con 50.000 espectadores en contra, Estudiantes volvió a escribir una página de gloria en su rica historia y tuvo esa mística copera de otros tiempos para avanzar a la gran final.