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miércoles, 30 de abril de 2008

Santos (BRA) Vs. Cúcuta Deportivo (COL)

Santos doblega a Cúcuta deportivo 2-0



2 - 0
Min. 18 Lima (Santos)
Min. 71 Mauricio Molina (Santos)
Final

El Santos de Brasil dominó al Cúcuta de Colombia y lo derrotó por 2-0 con goles de Lima y del colombiano Mauricio Molina, en el duelo de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores.

Los brasileños no ofrecieron su mejor presentación pero con los goles del debutante Lima (m.17) y del goleador Mauricio Mao Molina (m.70) tuvieron suficiente para doblegar a un rival ultraconservador, que salió a jugar pensando en sacar un punto del estadio Vila Belmiro.

Gracias a la mayor ambición de los pupilos de Emerson Leao, el conjunto del litoral de Sao Paulo partirá con una cómoda ventaja para el choque de vuelta, la semana próxima, en la ciudad del oriente de Colombia.

El Cúcuta Deportivo, tal y como hizo en el compromiso de la fase de grupos, que enfrentó hace dos semanas a los mismos equipos, saltó a la cancha con la misión de mantener el arco resguardado y esperar suerte en algún contraataque aislado, a través del ariete Matías Urbano.

El argentino fue el único y solitario delantero que esperaba en punta para realizar esta hazaña, pero no estuvo especialmente inspirado ni recibió suficientes balones desde la zona medular.

Con ese ánimo, los hombres de Pedro Sarmiento cedieron la pelota a los brasileños, que la mantuvieron en su poder durante largos minutos sin saber muy bien que hacer con ella.

El Santos, demasiado estático, no encontraba resquicios por los que perforar la maraña defensiva del conjunto rojinegro de Colombia.

Tan solo en una ocasión aislada en la primera mitad, un inspirado Betao tuvo el radar preciso para centrar hacia el área pequeña, donde esperaba el debutante Lima, que se zafó de sus marcadores y remató a bocajarro para establecer el 1-0.

Después del gol, el guión del partido continuó siendo el mismo. El equipo de Pedro Sarmiento despreciaba la pelota y el Santos, con menos prisa, tuvo serios problemas para imaginar jugadas mínimamente creativas o con la intrepidez necesaria como para superar la bien posicionada defensa colombiana.

Los tímidos intentos santistas de abrir más el campo por las bandas, con las internadas del extremo Wesley, se vieron abortados por el humo de las bengalas que encendieron los fanáticos del equipo brasileño, que obligaron a detener el partido por unos cinco minutos.

Este parón enfrió al Santos y le dio un nuevo aliento a los colombianos, que crearon su primera ocasión en un tiro lejano del paraguayo José Amarilla, que chutó bombeado, buscando el larguero obligando a lucirse al arquero Fabio Costa.

No obstante, el colombiano Molina acabó con cualquier intento de reacción de los visitantes al marcar el segundo tanto de falta, desde cerca de la esquina de córner.

Fue un centro muy cerrado que se envenenó engañando al arquero Leandro Castellanos tras golpear en la cabeza del defensor central Elvis González. Fue la sexta celebración del Mao Molina, en el día de su cumpleaños 28º.

Después, una serie de faltas y amonestaciones el árbitro mexicano Marco Rodríguez dejó al Santos con diez, por una agresión de Wesley a un rival.

En los minutos finales, el partido bajó de ritmo, se interrumpió por largos segundos y alejó cualquier posibilidad de escaramuza de los colombianos.

Este partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores se disputó en el estadio Vila Belmiro, de Santos, ante unos 17.000 espectadores. Se respetó un minuto de silencio por la muerte de Nelson Rodríguez Teixeira, familiar del presidente del Santos, Marcelo Teixeira.

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