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miércoles, 10 de septiembre de 2008

Brasil Vs. Bolivia

Empate a cero entre Bolivia y Brasil






Estadio Olímpico Joao Havelange
0 - 0
Final


Bolivia, con diez jugadores desde el inicio de la segunda parte, conquistó un histórico empate sin goles en su visita a Brasil, que volvió a adolecer de falta de mordiente e ideas, con sus estrellas Robinho y Ronaldinho Gaúcho totalmente desaparecidos.

El seleccionador brasileño Carlos Caetano Bledorn Verri, Dunga, que había ganado un poco de aire con la victoria por 3-9 del pasado domingo ante Chile en Asunción, volvió a la cuerda floja con este resultado y el pobre juego desplegado, que motivó insultos y abucheos desde las tribunas del estadio Engenhao, de Río de Janeiro.

Los escasos aficionados que acudieron a ver el partido despidieron al técnico con apelativos de 'burro' y '¡fuera!', del mismo modo que hicieron los que asistieron al empate a cero entre Brasil y Argentina del pasado 18 de junio.

El estratega brasileño volvió a apostar por el esquema del último encuentro, pero en este caso, la verde-amarilla impuso un ritmo lento, con pases cortos que no creaban demasiados problemas a la defensa boliviana, que presionaba la salida del balón en el campo contrario.

Poco más de veinte minutos tardaron los aficionados brasileños en abuchear el juego excesivamente horizontal de Brasil, que sólo había amenazado hasta ese momento con un remate de cabeza de Luis Fabiano, a centro de Maicon.

El planteamiento defensivo de Erwin Platiní Sánchez ahogó la medular brasileña e impidió que los jugadores más creativos de Brasil, como Robinho, Ronaldinho Gaúcho o Diego, recibieran balones cerca del área rival en los primeros 45 minutos.

Al comienzo de la segunda mitad, el árbitro expulsó a Ignacio García, con una rigurosa roja directa que castigó un empujón a Robinho. Brasil, con un hombre más, incrementó su dominio, pero todavía encontró dificultad para mover el balón con fluidez y crear ocasiones de gol.

Dunga buscó refrescar el equipo dando entrada a Julio Baptista y después a Nilmar, en sustitución de Ronaldinho, que no aportó nada al juego ofensivo de su equipo y recibió su ración de abucheos de la afición carioca al ser sustituido.

El media punta de la Roma se asoció bien con el lateral Juan y juntos realizaron un par de triangulaciones que crearon suspense, pero que no llegaron a incomodar al arquero Carlos Arias.

Brasil se fue diluyendo en la maraña defensiva de los bolivianos, que resistieron con garra y entereza el empate sin goles.

Con este resultado, Brasil suma trece puntos, cuatro menos que los del líder, Paraguay, mientras que Bolivia ascendió hasta los cinco enteros, que le mantienen en la última casilla de la clasificación general, pero ahora con renovado entusiasmo.

Este partido, correspondiente a la octava jornada de las eliminatorias del Mundial de Sudáfrica 2010, jugado en el estadio Olímpico Joao Havelange, Engenhao, fue presenciado por 15.000 espectadores.

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